Los requisitos para la obtención de la residencia cuenta propia por tanto tienen una doble vertiente económica y de capacitación o cualificación profesional. En numerosas ocasiones será incluso legalmente exigible pertenecer a determinados colegios profesionales en función de la actividad a desarrollar. Asimismo, puede ser exigible por parte de la Administración el tener que demostrar la capacidad para emprender la actividad profesional no solo mediante documentación sino también a través de la experiencia verificable. La legislación marca que no es la oficina de extranjería quien ha de evaluar estos parámetros; si no que su valoración será realizada por una de las Federaciones de trabajadores autónomos reconocidas por la normativa tales que la UPTA, ATA u OPTA así como cualquier otra confederación intersectorial o agrupación sectorial debidamente registrada. Por tanto, es posible concluir que para que la autorización de residencia por cuenta propia sea viable la tramitación y consecución de un informe favorable es esencial para el trámite de residencia por cuenta propia.

El solicitante deberá a su vez reunir una serie de requisitos comunes a la tramitación de cualquier expediente de extranjería como son no ser ciudadano comunitario, suizo o del espacio económico europeo, carecer de antecedentes penales, donde haya residido por delitos asimilables a la legislación penal española, o no encontrarse en España de forma irregular al formular su solicitud, ni haber sido declarado persona non grata. Una vez cumplidos estos mínimos es posible comenzar la tramitación de su expediente adjuntando la documentación específica como son las licencias de apertura y funcionamiento de los locales o establecimiento, máxime hoy en día respecto de la normativa sanitaria. Todo ello en consonancia con lo ya expuesto sobre contar la cualificación profesional y/o experiencia así como la suficiencia de los recursos económicos para la obtención de la residencia por cuenta propia.